En el post de hoy os quiero hablar del que debería ser algo vital para una persona creativa: el cuaderno. Ese bloc de notas que se lleva por si acaso las musas no te encuentran en el lugar adecuado. ¡Cuántas veces me habrá salvado ese por si acaso! Yo siempre suelo tener más inspiración cuando estoy en un transporte público o paseando, así que mi cuaderno me ha ayudado a no olvidarme de aquellas ideas que me han surgido.
La razón de esta publicación no es otra que animaros a que llevéis siempre un cuaderno a vuestro lado (con un lápiz o boli, claro). Con uno de tamaño mediano sirve, incluso también uno más o menos pequeño. La cuestión es que seas capaz de escribir bien en él y lo puedas llevar a todos los lados contigo.
Si os convenzo de utilizar esta herramienta, os proponga también este reto: durante un mes, escribir a diario en ese cuaderno. Lo que sea. Da igual si es una ida, un escrito o un garabato. Hacedlo y os aseguro que os sorprenderá lo que puede salir de ello.
Y es que el cuaderno no tiene porque utilizarse solo para apuntar las ideas que nos surgen, también puede ayudar a que generemos unas nuevas leyendo lo que hemos escrito. Sería algo así como una retroalimentación. Lees lo que escribes y siguen tirando del hilo, dándole forma a aquello que se ve borroso o simplemente creando alrededor de lo que has escrito.
Para mí, ese cuaderno se tiene que convertir en una fuente de inspiración. Nuestro deseo para con él será el de llenar cada vez más las páginas vacías para acabarlo y poder empezar otro bloc. Cada página será un lienzo donde plasmar ideas y seguir avanzando en nuestra creatividad.
A su vez, el escribir en la libreta nos puede servir en los momentos en los que te sientes atascado o sin inspiración. No hay nada más inspirador que ver aquello que has escrito antes, aunque te parezca que es una mierda y que con x años escribías como el culo. Te servirá para darte cuenta lo que has avanzado y lo que puedes llegar hacer. Si utilizas bien estos dos aspectos, la inspiración volverá y tarde o temprano el atasco se disolverá.
En conclusión y como ya he dicho antes, os recomiendo muchísimo que tengáis siempre un cuaderno cerca. Si no sois tan tradicionales o no tenéis ningún sitio donde guardarlo, utilizar el móvil para escribir o plasmar vuestras ideas. Os recomiendo Evernote, del que ya os hablé antes (véase aquí) para utilizarlo como libreta de notas, ya que te lo puedes bajar al móvil, además de tenerlo en el ordenador sincronizado.
Anécdota divertida: El blog y mi cuaderno tienen el mismo nombre. Los dos son el diario de un gato negro.