El gato negro dice: ¿qué tiene que tener una buena historia para mí?

¡Hola Gatos Negros!

Me parece alucinante que no os escriba desde diciembre del año pasado. ¡Qué mal gatito bloguero soy! Bueno, voy a remediar eso trayéndoos un nuevo y espero que interesante post. El cual quiero que sea el primero de muchos otros este año. Como sé que os gustan mis reflexiones, hoy os voy hablar de lo que para mí tiene que tener un historia, y por consiguiente un libro, para que me atraiga. Y digo para mí porque cada uno es un mundo y lo que a mí me guste, puede que a ti no. Pero oye, quizás coincidamos en alguna y compartir cosas con la gente es una cosa de lo más maravillosa.

Entonces,

¿qué tiene que tener una buena historia para mí?

Intriga

Si no me pica la curiosidad, leeré la sinopsis y lo dejaré donde está para no abrirlo nunca más. Desde siempre he sido una persona que necesitaba desvelar lo oculto, conocer  las respuestas a las preguntas que me hacía. Por eso casi toda mi infancia quise ser arqueóloga. Necesito ese empuje de conocer las cosas, de desvelar sus secretos. Si no lo encuentro, suelo perder rápidamente el interés y pasar a otra cosa.

Un mundo interesante

Me flipa muchísimo encontrarme con lugares que sean diferentes a mi realidad, sobretodo si están bien construidos. Estos pueden ser pura fantasía, como por ejemplo el Grishaverso, o también realistas pero con un toque diferente, pongamos como ejemplo Desconexión o Siega de Neal Shusterman. Si leo, en parte, es porque quiero vivir cosas imposibles y nuevas, y una buena forma de hacerlo es a través de mundos interesantes.

Un ritmo equilibrado

Es algo difícil de conseguir, lo sé. Pero soy un culo inquieto y necesito una historia que ni me aburra, ni me abrume. Si una novela consigue más o menos ese equilibro, con sus errores y sus aciertos, será muy difícil que lo deje.

Personajes medio decentes

Sé que suena muy mal decir personajes medio decentes, pero es que no suelo ser muy exigente con este tema. Me cuesta bastante encariñarme de los personajes. Por ejemplo, me encanta ver la pasión que siente la gente hacía personajes de Harry Potter, a mi es algo que casi nunca me pasa. Podría contar con los dedos de dos manos cuales son los personajes a los que tengo cariño. Por eso, mientras estos no me parezcan gilipollas puede soportar que no me caigan ni bien ni mal.

Una pluma cuidada

No soporto las historias que están hechas a medio gas, como si al autor no le importase lo que está escribiendo. O en este caso, cómo lo esta escribiendo. Por desgracia para mí, he visto muchas historias que tenían una escritura descuidada y la verdad es que eso me hace sangrar los ojos. Por ejemplo, eso me paso con Caraval. Me daba la sensación de que la autora quería hacer todo tan sofisticado en la historia que muchas veces perdía el norte y no llegábamos a entenderla bien. Creo que si quieres hacer una buena historia tienes que valerte de tus habilidades de escritor y no excederte, porque  entonces estarás entrando en algo mayor de lo que eres capaz de hacer.

Pues estos son los aspectos más importante para mí. Y para vosotros, ¿qué tiene que tener una buena historia? Ya sabéis que me encanta saber lo que opináis vosotros, así que cualquier comentario tiene las puertas abiertas.

Espero que os haya gustado mi vuelta al mundo blogueril. Intentaré estar más a menudo por aquí. Mientras tanto…

¡Cuidaos y hasta el próximo post Gatos Negros!